MARCAR COMO ‘NARCO’ El extraño caso del editor de TuPeli en la Universidad
El extraño caso del editor de TuPeli en la Universidad acompañado por dos soldados
Un antiguo periodista de piezas de portada regresa a la Universidad para terminar la carrera ya de de mayor y antes de que se acabe el plan de estudio de licenciatura.
Un estudiante se hace su amigo ya en la parte final del curso con comentarios siempre elogiosos, … una vez le llevó con otros dos que estudiaban para militares profesionales, de fiestas en pisos por la zona urbana.
Esa vez, había estado en el evento anual de ex colegiales de su residencia de estudiantes y en conversación, el año anterior, con un ex ministro de la dictadura que había sido director de los colegios mayores de la zona. Este año ya no estuvo simpático. Fue raro.
Tras despedirse del ex ministro, le llamaron para ir a las fiestas, y fue.
En una de las fuestas, tras una estancia larga, se van tras una conversación rara de una chica: Tu eres el narco de la fiesta y vienes a ver qué vendes.
El hombre, que estaba en conversación animada con otra persona, le mira raro sin saber si reír o sorprenderse.
El de Tupeli y sus dos amigos. jóvenes militares, le dicen que se van y él con ellos.
Tenían que llevarle a coger su coche que dejó aparcado en el campus y no estaba tan cerca como para ir andando y a esas horas.
Pelo largo, aspecto físico del actor Johnny Deep, coche BMW 740 siempre aparcado en la Facultad los días de clase: Quedó marcado entre estudiantes como probable narco. Oye, coincide con los de las pelis.
La presencia y participación de dos estudiantes para soldados profesionales da o daría credibilidad a la difamación.
El caso es que en los dos meses posteriores sufrió dos registros del vehículo: Uno tras salir de noche y solo del aparcamiento tras horas hablando con una compañera de clase, la chica no se iba. Y otra cuando fue a llevar a otro a su barrio en el norte de la ciudad. Fue él el que insistió en que fueran.
Y si fue una estrategia de marcaje para justificar actuaciones policiales que desconocen que han sido manipulados y engañados.
Ha logrado contactar con el estudiante del segundo registro, hoy ya un ‘treintañero’, pero no contesta a correos y llamadas tras una en la que quedaron en hablar ya que tenía una reunión y hay que colgar el teléfono, según dijo tras la sorpresa del contacto 10 años después.
Los policías, armados y en camioneta, pusieron cara de desconcierto al no encontrar nada en el maletero.
En los dos registros fueron directamente al maletero y era de noche. ¿Un chivatazo artificial? MUY RARO.
Si fuera una pieza para capítulo de teleserie, estamos ante un operativo no legal de servicios secretos, similares o cercanos para que policías abran carpeta O UNA ESPECIE DE FICHA POLICIAL.
Razón: Alguien le tiene ganas. Algo publicaría en sus tiempos de portadas en prensa nacional que no gustó nada. Al detectarle por un reportaje con foto sobre él en la Universidad en un suplemento de la prensa nacional; precisamente en un diario del que fue despedido por presiones externas tal vez con remuneración muchas años antes. Ellos insistieron en hacerle fotos.
Con la ficha policial o carpeta abierta, cada vez que un policía se interese por él tras pedirle el DNI o al alojarse en un hotel, activa un acto de vigilancia en apariencia legalmente justificado. Nuevos operativos cuentan con testigos y el chismorreo ciudadano entra en acción Ya no lo para nadie. También pudo ser una broma de Universitarios que se les fue de las manos. REDACCIÓN MALICIA Y TRAICIÓN
TRAMPAS DOSIER, EN AMAZÓN